La Resurrección del Señor

Miércoles de la 14ª semana del Tiempo Ordinario (Ciclo impar) – Espiritualidad digital

Ovejas descarriadas en remojo

Es tiempo de playas y piscinas. Y la moda femenina en cuanto a la indumentaria de baño no es precisamente un derroche de tela. Supongo que será por salvar el planeta y no producir más textil del necesario, aunque alguien debería pensar también en salvar el decoro. Cuento esto porque hay quien se asusta, y decide no acercarse a las playas y piscinas para no «ver demasiado». Pero también hay quien ve un terreno a conquistar para Cristo. Me decía una mujer: «Esa vecina mía parece que tiene mucho que enseñar. Pero más tengo yo que enseñarle a ella». Así que se tumbó a su lado y, entre vuelta y vuelta de bronceado, le acabó hablando de Cristo.

Id a las ovejas descarriadas de Israel. Esas ovejas descarriadas están muy cerca, tomando el sol junto a vuestra casa. No dejéis que nos arrebaten las playas ni las piscinas. Tenemos mucho más que enseñar que ellos. Ellos (o ellas) sólo enseñan carne. Nosotros mostramos al Salvador del mundo. Es cierto que, si tenéis niños pequeños, quizá haya que buscar un ambiente más favorable. Pero, si podéis, lanzaos a evangelizar sin ninguna vergüenza a quienes hace tiempo que la perdieron para pecar.

(TOI14X)

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