Cerebros planos y boquetes abiertos

boqueteCreo que el Señor debe estar a puntito de llegar, porque su anuncio es claro: A la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre. Y ésta es la hora en la que nadie piensa. Los cerebros occidentales han sido absorbidos por las pantallas, y la filosofía ha sido barrida de los planes educativos. Ahora sólo sentimos, y sentimos lo que quieren que sintamos. Pero el arte de pensar con rigor ha desaparecido de la faz de Occidente.

Bueno, es un desahogo. El Señor, desde que se fue, ha estado siempre a puntito de llegar. Quizá antes de que termine de escribir estas líneas. Pero si las termino, mi intención era hablar del boquete: Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, velaría y no le dejaría abrir un boquete en casa.

No uno, sino dos boquetes le abrió el divino Ladrón al Demonio. El primero fue la Virgen, inmaculada desde su concepción. Y por ese boquete abierto en el pecado entró el Verbo en el mundo. El segundo boquete fue la Cruz, esa brecha en la muerte convertida en puerta del Cielo. Por uno entró Él, por otro salimos nosotros. Bendito atraco.

(TOP29X)

“Tú, pecador