La Resurrección del Señor

16 mayo, 2023 – Espiritualidad digital

Prefiero la tristeza

No siempre la tristeza es mala. Frente a las tristezas que proceden del egoísmo, y de las que es preciso huir como de una cárcel, hay tristezas santas, que brotan del cariño, y esas tristezas son dignas de ser amadas y acariciadas como un tesoro.

Ahora me voy al que me envió, y ninguno de vosotros me pregunta: «¿Adónde vas?» Sino que, por haberos dicho esto, la tristeza os ha llenado el corazón. A estas alturas del discurso, los apóstoles se habían convencido de que Jesús se estaba despidiendo. ¿Cómo no estar tristes? ¡Qué bien retrató aquella tristeza Fray Luis de León!: «¿Qué mirarán los ojos que vieron de tu rostro la hermosura que no les sea enojo? Quien gustó tu dulzura ¿qué no tendrá por llanto y amargura?»

Lo que me asusta es ver a muchos cristianos a quienes no ver el rostro de Jesús no les disgusta en absoluto. Algunos, porque convirtieron la religión en un ejercicio tan espiritual que olvidaron a la carne en su aventura. Y otros, porque tienen los ojos tan saturados de series de tv y mensajes de WhatsApp que dejaron de echar de menos la santa faz de su Redentor.

Prefiero la tristeza.

(TP07M)

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